Para triunfar en la vida, no es importante llegar el primero. Para triunfar simplemente hay que llegar, levantándote cada vez que te caes en el camino.
Si no te esfuerzas hasta el máximo, ¿cómo sabrás donde está tu límite?
Cada fracaso supone un capítulo más en la historia de nuestra vida y una lección que nos ayuda a crecer. No te dejes desanimar por los fracasos. Aprende de ellos, y sigue tu camino.
Rut.